Cerro la puerta y bajó con tanta rapidez las escaleras que parecía que ni siquiera hubiera pisado el suelo cuando sin darse cuenta ya estaba en la calle, pero ésta pasaba totalmente desapercibida para ella, solo pensaba en cuanto había deseado que llegara este momento, los semáforos, los coches,las aceras, el resto de peatones, las luces que alumbran la cuidad esa noche, nada existía, solo su paso acelerado y un sueño que se convertiría en realidad
Miraba el reloj, sin ver la hora y seguía corriendo, de pronto, PARA, levanta la vista, ya había llegado piensa al mismo tiempo que nota su acelerada respiración.
mira a todos lados sin ver nada
- esperaré sentada.
y vuelve a mirar el reloj, esta vez percantándose de la hora exacta.
- bueno,sólo son cinco minutos, a los cuales se fueron sumando otros cinco, otros díez,otros quince...
Volvía a mirar.....seguía sin ver.
De vuelta a casa se dió cuenta de lo bonita que habían dejado la ciudad, le encantaban las luces, qué cantidad de gente en la calle para ser martes..PARA, el semáforo está en rojo y cambia y vuelve a caminar, entra en el portal y sube las mismas escaleras, esta vez, con gran esfuerzo y cuando abre la puerta de casa
- ¡qué tonta! los sueños no se hacen realidad....
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